BIENVENIDO A BAYAHIBE
PUEBLO ENCANTADO
La República Dominicana es una tierra particularmente rica en ríos de los que se originan lagos y cascadas. Los ríos, además de ser fuentes de agua necesarias para la agricultura o la ganadería, son también uno de los principales atractivos del país.
Algunos ríos se pueden recorrer en bote con excursiones organizadas o se puede navegar en kayak como es el caso del Río Chavón, cercano a La Romana y famoso por haber aparecido en la película Apocalipse Now. En una de las orillas del río, en una posición elevada, encontramos un llamativo y elegante edificio, llamado Alto de Chavón, desde el cual se puede admirar el río en toda su belleza. Otros ríos, como el Río Yaque del Norte, de gran caudal se originan, a lo largo de su recorrido, rápidos para los amantes del rafting.
El Río Yaque, en particular, es el más importante del país con sus 300 km de recorrido que van desde el Pico Duarte para desembocar en el Océano Atlántico. Además de ser un gran atractivo para jóvenes y mayores, garantiza el abastecimiento de agua a las tierras de Jarabacoa y el valle del Cibao. El valle del Cibao también es atravesado por el río Yuna, el segundo del país, que desemboca en la bahía de Samanà. Al sur, en la provincia de Barahona, los ríos y cascadas se encuentran entre los principales destinos de excursiones. A lo largo del camino para llegar a Pedernales e inmediatamente después de Barahona encontrarás dos puntos donde los ríos San Rafael y Los Patos llegan al mar, formando pozas naturales con agua verde esmeralda.
Las cascadas, fuente de gran curiosidad tanto para turistas como para no turistas, se ubican en posiciones cada vez menos accesibles. Algunos escondidos en los bosques tropicales accesibles solo después de largas horas de caminata, otros accesibles con la ayuda de burros o caballos y otros, ubicados en caminos más transitados, de fácil acceso incluso con niños más pequeños.
Las más visitadas son: en el norte, en la península de Samanà, muy sugerente y con una altura de unos 30 metros encontramos la cascada de Limón. En el centro, en la región de Jarabacoa, los saltos de Bayguate y Jimenoa recuerdan al Jurásico por su conformación y belleza. En la provincia de Puerto Plata, en cambio, no solo encontramos cascadas únicas sino también una impresionante serie de cascadas inmersas en un paisaje rocoso donde los visitantes pueden sumergirse en piscinas naturales o dejarse llevar por la corriente, los 27 Charcos. de Damajagua son, por tanto, las cascadas más visitadas del país. Finalmente, yendo hacia el sur, en la provincia de Monte Plata, recordamos el Salto Alto que cae majestuosamente durante unos 24 metros y el Salto de Socoa, de aguas cristalinas y de fácil acceso por estar ubicado a lo largo de la carretera Santo Domingo-Samanà.